jueves, 23 de mayo de 2013

Alineamientos y conjunciones planetarias en mayo



Por Oswaldo González Sánchez,
astrofísico y responsable de Didáctica del Museo de la Ciencia y el Cosmos.

Entre los días 26 y 28 de este mes, los planetas Júpiter, Venus, Mercurio y La Tierra  se encontrarán situados en una línea casi perfecta. Este es un fenómeno que, en ocasiones, algunos interpretan de forma catastrofista. Pero realmente no tiene más importancia que la curiosa perspectiva con la que podemos observar a los demás planetas desde el nuestro, reunidos en una pequeña parte del cielo como si de una confabulación planetaria se tratara.


Nuestro planeta, al igual que el resto de los planetas del Sistema Solar, gira alrededor de nuestra estrella en una órbita ligeramente elíptica. Este movimiento hace que las distancias entre los planetas varíen constantemente. La visión desde la superficie de la Tierra de la posición de los planetas induce a pensar que, aparentemente, están juntos, aunque en la realidad están situados a muchos millones de kilómetros.

Durante los días finales del mes de mayo y comienzos de junio tendremos la oportunidad de observar esta curiosa perspectiva a simple vista, con los planetas más brillantes del Sistema Solar. Los planetas Júpiter, Venus y el esquivo Mercurio formarán una línea imaginaria sobre el horizonte oeste una vez sean visibles, aproximadamente media hora después de la puesta de Sol.

Al anochecer del domingo 26 de mayo, veremos un triángulo formado por estos tres planetas, los objetos más brillantes que en ese momento se verán en el cielo. El día 28, los dos más brillantes -Venus y Júpiter- tendrán su mayor aproximación aparente (conjunción), separados tan sólo por 1º equivalente a dos veces el tamaño con el que vemos la Luna. A partir de esa fecha volverán a alinearse y alejarse unos de otros hasta la primera semana de junio, cuando Júpiter se aproxime aparentemente al Sol y desaparezca a causa del brillo de este último.

Esta es una muy buena oportunidad para poder localizar a Mercurio, el planeta más difícil de encontrar debido a su cercanía al Sol. Este planeta siempre está inmerso en la luz del crepúsculo aunque su brillo lo sitúe entre los cuatro objetos más brillantes del firmamento. Durante las tres primeras semanas de junio estará situado no muy lejos de Venus, el objeto más luminoso, después de la Luna, del cielo nocturno. Este último planeta, también conocido como “el lucero vespertino”, estará visible sobre el horizonte oeste hasta final de año. A partir de ahora tendremos bellos anocheceres con este lucero como protagonista.


Venus, Júpiter y Mercurio desde Tenerife (27/05/13)